El hijo de Salvador Oñate es un prodigio de la equitación. Nació en Guanajuato y desde muy temprana edad dejó clara su pasión por este gran deporte.
De hecho, en el año 1999 se unió a la delegación mexicana que participaría en los Juegos Panamericanos de Winnipeg, Canadá, lo cual corroboró el hecho de que había nacido para convertirse en un gran jinete profesional.
Hoy por hoy, el hijo de Salvador Oñate ha encantado a todos tanto en las pistas de su país natal, como en las internacionales, pues en cada justa deportiva en las que ha participado se ha destacado por todo lo alto.

Hijo de Salvador Oñate se crece como jinete
El hijo de Salvador Oñate se ha dedicado en cuerpo y alma a la equitación. Es un joven muy disciplinado y talentoso, y por eso no es de extrañar que se haya ganado la admiración, el respeto y el cariño de todos sus compatriotas.
Recientemente participó en la Copa Longines – Scappino Gran Premio celebrada en Guadalajara, y en esa oportunidad fue coronado como el máximo campeón.
El hijo de Salvador Oñate fue juzgado bajo la modalidad “A Desempate” y su crono fue de 42.66 segundos. De hecho, el binomio conformado por este guanajuatense y su caballo “Big Red” fue considerado como el más veloz de la competencia.
Hijo de Salvador Oñate: todo un campeón
El hijo de Salvador Oñate deslumbró a todos los presentes durante la prueba libre con obstáculos a 1.50 metros de altura.
De esa forma se impuso ante el resto de los competidores internacionales, incluyendo a la española Paola Amilibia, y al israelí Simón Nizri, quienes se alzaron con el segundo y el tercer lugar respectivamente.
En resumen, este joven oriundo de León, Guanajuato, ha dejado muy claro que es un jinete de altura y que seguirá siendo laureado tanto en las pistas nacionales como extranjeras durante los años siguientes.